miércoles, 18 de mayo de 2011

Involución



-Papá, ¿qué es la involución?


-Hijo, ¿a qué viene esto ahora?


-Es que se lo oí a unos señores en el parque...


-¿Y qué decían?


-Pues... No se qué de la Sociedad..., que adónde iba a parar... y luego dijeron algo sobre la involución. Y me quedé con la duda. Explícamelo, papá.


-A ver, la involución es... No, déjalo, eres muy pequeño para entenderlo.


-Venga, dímelo, papá.


-Bueno... a ver cómo te lo explico. Mira hijo, la involución es como si la Sociedad, en vez de ir progresando, fuera hacia atrás, de nuevo a las cavernas... Es que no sé cómo decírtelo para que lo entiendas...


-Entonces, ¿la involución es, por ejemplo, que algunos chavales de mi clase insulten al profesor, y que encima, si el profesor hace algo, se quejen a sus papis y que les defiendan? ¿Involución es que mi profesor de matemáticas estuviera una semana sin poder venir porque estaba en el hospital; después de que el padre de uno de mis compañeros le pegara? ¿Y también es involución que al que suspendió todo, los padres le compraran una nueva consola?


-Sí, hijo, eso es involución. Involución, como esos pobres niños que hay en el mundo, que darían lo que fuera para ir a la escuela, mientras que otros chavales a los que no les falta de nada, darían lo que fuera por no ir. Involución es que ahora el más popular en las clases es aquél que no va a llegar a cobrar la jubilación, porque antes se habrá destruido a sí mismo.


-Entonces, ¿también es involución que haya niños que tengan que sudar sangre para conseguir un mísero trozo de pan, mientras que hay otros que se permiten en lujo de tirar la comida?


-Sí hijo, eso también es involución. Como que también es involución que los trabajadores que tienen uno de los mejores sueldos del país, decidan todos dejar de trabajar y colapsen el trafico aéreo, mientras que los demás tenemos que ganarnos el sueldo de cada día sin presentar queja. Y que también, los médicos de hoy en día no se dediquen a salvar vidas, si no a cumplir con los objetivos que les son mostrados en un papel.


-¿Como aquélla vez que tuvimos que ir a urgencias y no nos atendieron porque decían que no era el hospital que nos correspondía?


-Por ejemplo. Y hablando de enfermedades, también es involución que nadie tome ninguna medida en serio para ayudar a los haitianos.


-¿Qué es un haitiano?


-Pues es un señor que vive en Haití, que es un país que está en una isla cerca de Cuba y de EEUU. Y ya que he mencionado este país, también es involución que, todo lo que se ponga de moda allí, lo sigamos en todo el mundo como tontos. A este paso no vamos a tener personalidad. Haremos lo que nos digan los típicos cuatro payasos de turno, infundiéndonos ideas de usar y tirar, que sirven para involucionar aún más.


-¿Pero, papá, por qué me cuentas todo esto?


-Porque yo quiero que en un futuro, cuando seas mayor, luches contra esto. Porque nuestro turno para arreglar las cosas ya pasó. Ahora os toca a vosotros. A toda vuestra generación. No permitas que este mundo en involución sea cada vez peor. Hijo, si por un casual fueses un hombre con mucha influencia, recuerda las palabras de tu padre, e intenta cambiar el mundo en la medida de lo que puedas. Es difícil, pero no permitas que el materialismo, la codicia y los malos valores perviertan el mundo en el que vives. Apuesta por la cultura, la educación, la honestidad y la solidaridad. Y nunca desees a los demás lo que no quieras que te pase a ti. Recuérdalo hijo, el futuro está en vuestra generación. Bueno, yo creo que por hoy es suficiente. Además, mira la hora que es. ¿No deberías estar ya en la cama?


-Es verdad, papá. Buenas noches.


Si al menos estas palabras cambiasen un poco las cosas...
Saludos, Álvaro Guzmán.

2 comentarios:

  1. una pena que hayamos involucionado tanto...

    ResponderEliminar
  2. Me apasiona este pequeño relato sobre una auténtica realidad, seguid con esta actitud compañeros.

    ResponderEliminar